Entrevista a la psicóloga Elena Montero
Alvarado, especializada en Atención e Investigación de Sociadicciones.
Las pantallas en sus diversos formatos y tamaños nos
rodean: quien no está con el móvil en la mano, tiene un tablet o está delante
del ordenador. Determinar el uso del
abuso puede ser clave para saber si estamos realmente ante un problema. Para
ello, la psicóloga Elena Montero Alvarado,
especializada en Atención e Investigación de Sociadicciones de la entidad
privada, independiente y sin ánimo de lucro AIS, nos explica en qué consiste
esta adicción. Esta asociación llevan más de 40 años tratando adiciones de
comportamiento como el juego patológico, la adicción a videojuegos, la adicción
al sexo, las compras compulsivas y la dependencia emocional.
- Con la invasión de pantallas en la que vivimos en la
actualidad, ¿cómo sabemos si tenemos adicción a las pantallas?
- Los síntomas principales que nos indicarían que tenemos un problema con alguna tecnología (pantalla) son: tener un deseo de usar esa tecnología de forma intensa y persistente, una falta de control a la hora de utilizarla, excesivo tiempo de ocupación y el abandono de actividades obligatorias o que nos gustan por utilizar esa tecnología. Pero el síntoma principal sería el uso continuado y excesivo de esta tecnología a pesar de las consecuencias negativas que nos está generando como por ejemplo: problemas en el trabajo, problemas con la familia, fracaso escolar, pérdida de relaciones, aislamiento, nerviosismo, depresión o ansiedad.
- Oficialmente y técnicamente, ¿a qué se denomina adicción
a las pantallas?
- Una
adicción a las pantallas se denomina a cualquier actividad que se realiza con
un ordenador, móvil, consola de videojuegos u otro dispositivo electrónico
(normalmente conectado a internet), que se hace de manera excesiva y
descontrolada, y que tiene repercusiones negativas en varias áreas de la vida
de la persona afectada. Las personas afectadas normalmente pierden el control
de alguna actividad cotidiana que realizan con estos dispositivos, ya sea
comprar online, actividades de carácter sexual, jugar a videojuegos o
comunicarse con otras personas mediante redes sociales.
- ¿Qué porcentaje de la población está afectada por esta
adición?
- En la
actualidad se habla de diversos porcentajes en cada una de las diferentes
adicciones relacionadas con tecnologías. Resumiendo, la población afectada
estará entre un 1% y un 3%, aunque como decimos depende de la conducta
concreta.
- ¿Qué grupo es el más débil o el más vulnerable a sufrir
este tipo de adicción y por qué?
- Dependiendo de la actividad concreta que se desarrolle
encontramos diferentes poblaciones vulnerables. En videojuegos y redes sociales
podemos decir que el grupo más vulnerable serian los jóvenes adolescentes
(hombres en videojuegos y mujeres en redes sociales). En adicción al sexo
online y apuestas online los hombres de mediana edad.Y en compra compulsiva
online, mujeres de mediana edad.
- ¿No estamos todos, en cierta manera, un poco enganchados
a las pantallas? ¿Se puede distinguir el uso del abuso?
- Es cierto
que muchas personas pueden abusar o utilizar en exceso los móviles u otros
dispositivos electrónicos, pero se puede distinguir entre uso, abuso y
adicción: Por un lado, el uso sería el que hace una persona normal cuando habla
por el móvil o se conecta a Internet por la utilidad o el placer de la conducta
en sí misma, sin que esto le lleve a consecuencias negativas. El abuso, sin
embargo, se produce cuando hay un aumento de la conducta de conexión en su vida
diaria, esta conducta interfiere en su cotidianidad sin que le traiga
consecuencias negativas de gravedad, pero no abandona otras actividades, no
pierde relaciones sociales debido a la conducta y no lo realiza de manera
descontrolada.
- ¿Cómo
se podría detectar una posible adicción?
- Las principales
señales de alarma de un uso problemático de internet o de las nuevas
tecnologías son las siguientes: aumento creciente del tiempo dedicado a la actividad concreta que se
realice mediante la tecnología; cambios negativos en el rendimiento o en el comportamiento
escolar o laboral, llegando incluso al absentismo; disminución en la
participación social y familiar, que puede derivar en conflictos familiares por
el uso del ordenador y en un aumento del aislamiento social donde la persona
exprese más interés por el juego, internet, etc., que ir con amigos, hobbies,
relaciones con el otro sexo, etc; cambios repentinos en el estado de ánimo
(irritabilidad, nerviosismo, tristeza), actitud, etc; incremento del gasto de
dinero en la conducta que se realice a través de la tecnología, ya sean
videojuegos, compra online… frecuentemente por encima de sus posibilidades,
incumplimiento de horarios y de tareas domésticas; manifiesta quejas orgánicas
inespecíficas, habitualmente leves: cansancio, sueño, dolores musculares, etc;
irritabilidad o reacciones agresivas ante intentos de control; ocultación,
negación (mentiras) que justifiquen el uso excesivo; ante cualquier problema o
dificultad se refugian en la actividad concreta (videojuegos, internet, compra
online, actividades de carácter sexual…); aumento del secretismo en torno a su
comportamiento en internet y con el resto de tecnologías.
- ¿Cómo es el tratamiento?
- Según la
literatura científica el tratamiento con más carga de evidencia sobre su
efectividad es la Terapia Cognitivo Conductual.
- ¿Existe alguna manera de prevenir este tipo de adiciones?
- En el caso de tener problemas con los
videojuegos o internet serían fomentar y
enseñar un “uso responsable”, no crear hábito, limitar tiempo de uso, uso como
“ocio” y no como “derecho”, programar horario de actividades en red, no
utilizar el ordenador en la habitación sino en espacios comunes, no permitir
contactos con desconocidos, no dar datos personales y tampoco descargar
archivos o programas “sospechosos”. Potenciar la vida familiar, educar y
reforzar en alternativas de ocio. En el caso de tener problemas de compra
online o de carácter sexual, serían ser conscientes de que se tiene un problema
y no utilizar la conducta concreta como modo de evasión a problemas. Además de
todos esto, la detección precoz del problema (signos de alarma) sería la mejor forma de prevención
para pedir ayuda especializada lo antes posible.
- En cuanto a la seguridad, ¿existe algún tipo de protocolo
de seguridad para evitar esta adicción?
- No hay un
protocolo de seguridad para evitar la adicción, si para prevenirla, instalando
filtros y programas para el control de contenidos.
- ¿Debemos socialmente preocuparnos de este problema?
- Debemos darle la importancia que requiere y que sea
necesaria en cada momento, no hay que alarmarse de manera que magnifiquemos el
problema.
- ¿Existe algún tema nuevo que os esté preocupando
especialmente?
- Actualmente se está discutiendo mucho sobre las loot boxes ó
micro transacciones de los juegos modernos, acusadas de fomentar el juego
patológico o ludopatía en los jóvenes.
- De cara al futuro, ¿hacia dónde estáis encaminados o
hacia dónde os gustaría ir profesionalmente?
- Se requiere más investigación en este tema para tener más
conocimiento y que este tipo de adiciones sean reconocidas. Es importante también unificar términos para
que podamos tener tratamientos más específicos.
Artículo elaborado por: Zuriñe Álvarez
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