- ¿Qué hay que tener siempre en cuenta a la hora
de iniciarse en este tipo de deportes?
Principalmente, la
condición física que uno tenga y de dónde procede la información de la que se
dispone. Hoy contamos con Internet, que es un arma de doble filo, ya que no hay
filtros ni criterios específicos para seleccionar la información; por eso, cada
vez nos encontramos más con gente que lee cosas y se cree que ya sabe todo
sobre la montaña. Esto es muy peligroso. La mayor parte de los accidentes
ocurren en la iniciación; en niveles expertos, es difícil que se den casos,
aunque también los hay.
Hace poco, hicimos
un pequeño estudio y vimos que muchos de los accidentes ocurridos vinieron por
la falta de información objetiva y especializada, así como por la ausencia de
preparación física y de material acorde a la actividad que estamos acometiendo.
Álvaro Ramos vive entre
montañas, en un pequeño pueblo de León, haciendo de su gran pasión su propio
trabajo. Los fines de semana son sus días de mayor actividad deportiva, ya que
guía y forma a los enamorados de los deportes de Alta Montaña como él. Es
consciente de que el medioambiente necesita que le echemos una mano y
aprendamos a respetarlo, por eso lucha para conseguirlo, a través de sus
formaciones. Le preocupa mucho la seguridad y quiere acabar con los accidentes
en estos tipos de deportes. Álvaro Ramos es Director de la Escuela Castellanoleonesa
de Alta Montaña, y nos abre los ojos ante la realidad de una práctica tan bonita
como exigente.
- ¿Cuál es la base y motor de la actividad de
la Federación?
Dentro de mi área,
lo que nos mueve es la formación de los federados y la seguridad en las
actividades de montaña. Ese es nuestro objetivo, que todos tengan la
oportunidad de formarse en este aspecto. Siempre se persigue el criterio de la
seguridad. Cuantos más conocimientos al respecto, mucho mejor. Además de
inculcar una educación y respeto por el medio ambiente.
Hay de todo. Desde
la gente más joven (8 ó 9 años) a la más adulta (65 años); aunque sí que es
verdad que, a partir de los 45, la gente se pone más barreras psicológicas y
les cuesta dar el paso para acudir a cursos de formación. Además, hay algunos
que se niegan a usar las nuevas tecnologías y las últimas técnicas.
- ¿Cuáles son los mayores encantos de los
deportes de montaña?
El mayor encanto es
el entorno donde se desarrolla la actividad. El tipo de deporte da lo mismo, la
magia la tiene el lugar donde ocurre. Por eso, después de la seguridad, la
conservación del medio es nuestro principal objetivo, aunque van siempre de la mano.
Los montañeros debemos respetar el medio ambiente, el lugar por donde nos
movemos.
La mayoría responde
positivamente cuando le presentas los argumentos de peso y las normas, pero
sigue habiendo muchos que se empeñan en ir contracorriente y saltarse leyes
básicas, que son fundamentales para conservar el entorno tan preciado en el que
nos movemos.
Hay gente a la que
le da igual que un ave esté anidando y los agentes medioambientales hayan
prohibido o regulado el paso en cinco meses, porque no entienden que es importantísimo
seguir esas normas. Antes, no había apenas reglas, había una sensación de
libertad plena en la montaña; pero el desconocimiento no exime de cumplir la
ley, por eso hay que respetarla.
- ¿Cuál es la herramienta teórica que nunca
debe faltar a la hora de evitar accidentes de montaña?
El sentido común;
es lo más importante. Por desgracia, es algo que se está perdiendo. La gente
que sale tiene que saber dónde y qué va a hacer, porque es lo básico para
evitar accidentes.
Por ejemplo, nos
encontramos con el Espigüete, que es uno de los lugares más llamativos de la
montaña castellanoleonesa, pero también uno de los más peligrosos, porque requiere tener un conocimiento del uso de
técnicas invernales básicas y la gente no se da cuenta de esto.
Siempre hay que
tener una buena guía de la zona, tener mapa de la zona, ser consciente de la
actividad que se va a realizar y preguntarse a uno mismo si se ve capaz de
hacerlo o no. Hay que saber cómo refrigerarse, alimentarse de la manera
adecuada, contar con el mejor material, etc. La preparación es primordial.
Siempre hay algo
que mejorar. Ahora mismo no tenemos la relación de los datos de los accidentes
que ocurren con la información de si el accidentado había recibido cursos de
formación previos.
Además, desde la
Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo de Castilla y León,
estamos intentando que la figura del profesor sea la de “Técnico Deportivo en Alta
Montaña, escalada en roca, media montaña y barrancos”. Creemos que es una
educación formal, con una formación mínima necesaria para ser un buen docente.
Además, así se atacara más el intrusismo que existe a día de hoy y que resulta
tan peligroso. Esto degenera la actividad. La falta de formación en la montaña
es un arma mortal.
- ¿Hay un compromiso real de responsabilidad
por parte de los usuarios de la montaña?
Siempre hay de
todo, pero por lo general, los datos no son muy buenos. La gente que lleva
muchos años peca de exceso de confianza, y los nuevos, muchas veces, creen que
va a ser mucho más fácil de lo que realmente es.
La suma de
incidentes es lo que provoca el accidente; si uno no para y reflexiona la razón
de los incidentes, acabará sufriendo un accidente. Cuando hay una muerte de por
medio, parece que da reparo ahondar en las causas, pero es la mejor manera de
saber qué ha ocurrido y qué es lo que no se puede volver a repetir. Sigue
siendo un poco tabú hablar sobre un accidente mortal, pero reflexionar sobre
esto puede salvar otras vidas. Hay que intentar extrapolar lo negativo y sacar
las verdaderas razones, para que no vuelva a ocurrir.
Un grupo dispar, el
material inadecuado, el mal tiempo… son señales que hay que ver claramente para
no encontrarnos con un desagradable final.
Son varias; desde
infravalorar la actividad, y que ésta nos sobrepase físicamente, hasta que nos
encontremos con pasos o trepadas que sobre el papel son sencillas pero, después
de unas cuantas horas de caminata o el peso de la mochila, hacen que se nos
atragante. Al no llevar material, como cuerda para asegurarse correctamente,
hacen que un pequeño resbalón acabe en tragedia.
Otra típica
imprudencia suele ser el no tener conocimientos de orientación, por lo que la
más mínima incidencia hace que no sepamos
dónde nos encontramos.
No solemos preparar
la salida en casa. Dónde vamos, datos técnicos de la ruta, qué material
necesitaremos, cuántas horas, teléfonos de refugios, de grupos de rescate,
posibles escapatorias, qué grupo de personas salen también ese día, etc. Esta
fase es fundamental para que cuando estemos en "el ajo" podamos tener
casi todas las variables controladas. Hay que pensar que el riesgo cero no
existe. Y por último, en casa se deben analizar los incidentes y accidentes que
hayamos tenido. Cuanto más críticos seamos mejor. Esto es lo que nos ira dando
experiencia.
- ¿Existe un incremento de los accidentes en
los últimos años? ¿Qué datos se tienen actualmente al respecto?
Creemos que va en relación
directa con el aumento del número de participantes. Aunque hay otras variables,
como que los montañeros no vamos sumando experiencias en montaña poco a poco y rápidamente
queremos llenar nuestro currículo montañero con grandes gestas, que nos den el
reconocimiento de nuestros semejantes.
- ¿Qué actividad de este tipo genera más
rescates en España? ¿Por qué?
La actividad que
más accidentes provoca es el senderismo. La principal razón es que es la que
más se practica por parte de los montañeros. La causa más destacada suele ser
que, al tener la sensación de ser una actividad segura y sencilla, parece que
no hace falta tener conocimientos en orientación ni una condición física
mínima.
- Recientemente se ha celebrado la IV Jornada
de Ciencia y Montañismo, donde hemos podido saber que el mayor número de
rescates se dan en el Pirineo Aragonés, aunque un 90% de las personas
rescatadas no son de Aragón. ¿Ocurre lo mismo en las montañas de Castilla y
León?
Sí. En Castilla y
León el mayor número de personas que son rescatadas son de otras comunidades.
En la zona de Burgos y Palencia suelen ser personas del País Vasco, así como en
Segovia y Ávila suelen ser de Madrid.
- ¿Qué hay que mejorar en materia de seguridad
en este ámbito deportivo?
Que la formación
básica de los montañeros no sea autodidáctica ni de otros amigos
"expertos". Ésta será nuestra base, para una buena formación como
montañeros. Y ha de hacerse con un profesional.
Cuando alguien
quiere aprender a esquiar o a nadar, se apunta a un cursillo. Pero en montaña
no. Aquí en España, que alguien se apunte a un curso de formación o contrate los servicios de un guía para
hacer una actividad está a años luz de los
países del arco alpino.
Se hacen pocas
campañas. Es uno de los aspectos sobre los que estamos trabajando. Normalmente
las campañas son sobre como actuar ante el accidente, pero pocos se hacen para
prevenir el accidente.
- En caso de accidente de montaña, ¿qué
protocolo de actuación se debe seguir?
Hay tres grandes
pasos: Proteger, avisar y socorrer.
Todos deberíamos,
no solo por ser montañeros, hacer algún curso de primeros auxilios. Por no
decir que debería ser formación básica en los colegios.
Una vez protegido
deberemos llamar a los teléfonos de emergencias de la zona donde estemos; en Europa
hay países que no funciona el 112, de ahí la importancia del trabajo en casa
para preparar la actividad. Una vez que nos hayamos comunicado con ellos, un
médico del 112 nos irá dando consejos de cómo actuar. Si no es posible la comunicación,
el sentido común y nuestro conocimiento en primeros auxilios tendrán que ser
suficiente herramienta para ayudar.
- El uso del material de seguridad es
imprescindible para estos deportes, pero ¿hay un buen seguimiento y revisión
del mismo? ¿Cuáles son los mejores consejos de uso?
No hay un buen seguimiento
y revisión del material; la principal razón suele ser la falta de conciencia como
consumidores. Intentamos ir a lo más
barato y al establecimiento que sea.
En la mayoría de
los pequeños comercios de montaña, la persona que nos atiende tiene una doble
experiencia. Por una parte suelen estar
al día en cuanto a materiales, normas y nuevos adelantos, pero por otro lado
suelen ser montañeros que practican varias disciplinas de montaña. Cuando
compramos algún tipo de material, el consejo que nos suelen dar es fruto de estas dos experiencias.
Al comprar el
material, con él suelen venir unas instrucciones de uso, mantenimiento y
revisión que casi nadie lee.
El mejor consejo es
leerlos y además dejarse asesorar por los verdaderos profesionales de la venta
de material. Una cosas es un profesional de la venta y otra la de un tendero
que esta en un trabajo esporádico y que podría vender hoy una cuerda y mañana
una tabla de surf.
- ¿Desde la Federación se siguen métodos
específicos para mejorar la técnica de los montañeros?
Intentamos
organizar encuentros de montañeros en los que se ofertan talleres para que la
gente pueda ver como es un curso y, además, que pueda recibir un mínimo en
cuanto a técnicas. Estos encuentros son
variados (orientación, nieve, roca, auto-rescate, etc.).
- ¿La belleza del paisaje suele cegar la
conciencia de seguridad en la montaña?
No, lo que suele
cegar la conciencia de seguridad es la actividad, no el paisaje.
- ¿Qué
pautas debe seguir el enamorado de las actividades en montaña para una práctica
segura?
Llevar a cabo las
tres fases de la actividad (preparación en casa, realización de la actividad y
una reflexión posterior de lo sucedido).
Preparar la
actividad en casa es fundamental (donde vamos, que material, horas, teléfonos, meteorología,
condiciones de acceso, condiciones de la nieve, grupo que ira, experiencia de
los miembros, escapes, etc.). Estos datos son los que nos darán herramientas
para que ante un problema podamos actuar con celeridad y de manera correcta.
- ¿En qué época del año hay mayor número de
afluencia de deportistas?
En verano. Aunque
en invierno cada vez hay más gente practicando deportes de montaña.
- ¿Y de accidentes?
En verano. Sobre
todo junio, julio, agosto y primera quincena de septiembre. Aunque
también durante las fiestas.
- ¿Qué parte de la montaña castellanoleonesa
no se puede dejar de visitar?
Vivo en un pequeño
pueblo de León. Por lo que no puedo ser muy objetivo con esta pregunta. Soy un
enamorado de la Cordillera Cantábrica.
- ¿Es tu favorita?
Si, junto al
Sistema Central, Pirineos, Alpes,..........
- ¿Cuál es la más peligrosa?
¡¡Ufff!!. Creo que
las más peligrosas son las que tienen una aproximación corta y fácil.
Fuentes Carrionas o
el Circo de Gredos son las que más accidentes tienen, ya que va muchísima gente
y en invierno, así como al principio de la primavera, la nieve y el hielo pueden dificultar mucho las
actividades.
En verano, en Picos
de Europa es donde más problemas se centran. Es un macizo montañoso
complejo y al que la gente va con
demasiada tranquilidad.
Aunque las zonas en
sí no son peligrosas; es la masificación
la que hace que exista allí un aumento de los accidentes. Cualquier zona, si el
montañero no tiene unos conocimientos mínimos, es peligrosa.
- ¿Qué es lo mejor y lo peor que esta forma de
vida te ha aportado?
Lo mejor es que
estoy siempre donde quiero estar, en el campo. Por ahora, lo peor es cuando voy
a determinados sitios veo cómo nuestro paso deja un rastro de basura y destrozo
del medio ambiente brutal. Hay refugios generando desperdicios y malgastando
agua para duchas y otros servicios no acordes a estas instalaciones de montaña,
estaciones de esquí y un largo etcétera. Me duele ver cómo pasa desapercibido
por todos.
- Un mensaje que te gustaría dar a todos los
amantes de la montaña.
Que cuidemos la montaña
y seamos críticos con lo que en ella se hace. Además, que seamos prudentes y
seguros en nuestras actividades de montaña.
Artículo elaborado por: María Alcubilla
Artículo elaborado por: María Alcubilla
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